A: Josep
Borrell
Alto Representante
de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad Común
Quienes suscribimos esta carta,
sentimos preocupación por el llamado a consulta en Bruselas, al embajador Alberto
Navarro González, representante de la UE en Cuba.
Su nítida trayectoria de más de
cuatro décadas al Servicio Exterior de España y al frente de los distintos
cargos que ha ocupado como representante de la Unión Europea, le hizo merecer
la Orden del Mérito Civil por el extraordinario trabajo y la constancia
ejemplar en el cumplimiento de sus deberes.
Nos preocupa que la razón del
llamado a consultas, se realice bajo la presión mediática y política de un
pequeño grupo de europarlamentarios que parecen más interesados en entorpecer
las relaciones de la UE y España con Cuba, que por fortalecer los vínculos de
cooperación que con tanta dignidad y arduo trabajo diplomático ha desarrollado
Navarro durante todos estos años, consecuente con nuestra política exterior y la del PE.
Los 16 eurodiputados, en su
mayoría españoles, representantes del PP, Vox y otros partidos conservadores,
exigen la dimisión de Navarro por haberse negado a catalogar a Cuba como una
dictadura y su supuesta adhesión a una carta pública enviada por centenares de
personas al Presidente de Estados Unidos Joe Biden, en la que se aboga por el
fin del embargo.
El Embajador Navarro en su larga
trayectoria jamás calificó a ninguno de los gobiernos en los que estuvo
acreditado como representante. Fuera el de Honduras, Checoslovaquia, Portugal
o Marruecos.
La respuesta de Navarro a la
pregunta de una periodista de un sitio web independiente de muy poca
relevancia, que fue amplificada de inmediato por ABC, Europa Press y otros
similares, fue la siguiente: «No, yo no considero que
Cuba sea una dictadura. Claro que no. Como embajador yo no puedo dar calificativos y menos del gobierno en el
que estoy acreditado». «Yo lo que voy constatando son los pasos que
se dan, la Constitución que se aprueba, las medidas para el trabajo por cuenta
propia que se aprueban, espero que ahora se impulse también a la pequeña y
mediana empresa».
Respecto a su supuesta firma en
la carta al presidente Biden, expresó: «Yo siempre he estado en contra del embargo unilateral de
Estados Unidos a Cuba». «Del mismo modo en que no tengo ningún inconveniente en
decirle que yo apoyo también todos los avances en favor de la democracia, del
diálogo y del respeto a los derechos humanos en Cuba, porque son cuestiones por
las que he estado trabajando y sigo trabajando aquí». «Pero, en este caso en concreto, yo no he
firmado esa carta, yo he mandado un correo personal diciendo que apoyaba esas
ideas porque son las que he defendido siempre. Yo diría que es más inteligente,
para favorecer la democracia en Cuba, levantar el embargo».
Las dos respuestas de Navarro
son consecuentes con la actual política exterior de nuestro gobierno y la UE.
La comunidad internacional año
tras año se expresa en la ONU en apoyo a la Resolución que presenta Cuba
demandando el fin del bloqueo económico, financiero y comercial de Estados
Unidos. Ha durado 59 años la política fracasada, cruel y absurda que tanto daño
provoca al pueblo cubano.
Nos preguntamos si los 16 europarlamentarios
que hoy le exigen la dimisión de Navarro, pedirán también que la UE condene a
los mandatarios europeos que se manifiestan públicamente contra el bloqueo.
Con todo respeto, le pedimos no
ceder a las presiones que responden claramente a marcados sesgos políticos y
ratificar al embajador Alberto Navarro González en sus funciones como
representante de la UE en Cuba.
Firmas: